Bendecidos para Bendecir

publicado en: Devocionales | 0

“Para que, en Cristo Jesús, la bendición de Abraham alcanzase a los gentiles”. Gálatas 3.14

En este versículo Pablo nos enseña dos cosas: Primero, que Abraham como hijo de Dios fue bendecido con mucho (Cristo). Segundo, que esta bendición tenía un poder expansivo. Es decir, por medio de ella Dios iba a bendecir a muchos más. Lo mismo sucede con nosotros. Hemos sido bendecidos, y debemos ser de bendición para los demás. Y si por si acaso dudas que eres bendecido, escucha las noticias y lee los periódicos. Entonces verás como muchos otros tienen infortunios y desgracias que tú nunca has tenido o tendrás. Luego, analiza tu propia vida y mira lo que haces cuando nadie te ve. Piensa en las motivaciones y deseos pecaminosos que tienes y lo único que podrás hacer después de esta honesta examinación es preguntarte ¿Por qué siendo tan malo, Dios me bendice con tantas cosas buenas? Nunca olvides que somos creaturas que siempre pecan en acción, pensamiento, palabra y/o, motivación. Sin embargo, aun así Dios nos sigue bendiciendo cada día.

No olvides tampoco que al ser bendecidos podemos (y debemos) ser de bendición para los demás. Así que no menosprecies las bendiciones que ya tienes. Cosas como la vida, tu salvación, un plato de comida, un amigo, una iglesia etc. Pero al mismo tiempo no menosprecies la manera en que puedes bendecir a los demás con una sonrisa, un abrazo, un regalo, palabras de aliento, una ofrenda, o algo más. Hoy es un buen día entonces para meditar en las “diez mil” y más bendiciones con las que Dios te ha bendecido…y luego pensar en las “diez mil” y más maneras en las que puedes ser de bendición alguien más.