Porque vosotros, hermanos, a libertad fuisteis llamados; solamente que no uséis la libertad como ocasión para la carne, sino servíos por amor los unos a los otros. (Gal. 5:13)
“El multiculturalismo siempre tiene la razón”. Con este eslogan se han creado leyes y se han reformado los sistemas de justicia en muchas naciones del mundo, en otras palabras, lo que dice el slogan es: “las minorías siempre tienen la razón, aunque moralmente estén equivocadas”. Es por esto que poco a poco en todo el mundo se va acentuando una sola manera de ver la vida, esto es, lo que los grupos minoritarios piensan y proclaman; de tal manera que si alguien piensa y expresa algo diferente es considerado un peligro inminente al statu quo. Por ejemplo, si hoy alguien expresa que el reclamo de los afroamericanos en Estados Unidos, no en todo su contenido es correcto, entonces esa persona llega a ser un peligro para el pensamiento “aprobado”.
Es verdaderamente triste ver que el mundo entero va alineándose a una sola forma de pensar, por cuanto el principio de libertad se lo sede con tanta facilidad frente a slogans como: “por su seguridad”, “en beneficio de todos”, slogans que, si bien temporalmente tienen razón, no deberían botar por tierra el principio que da dignidad al ser humano. Entonces lo que estamos viendo es que poco a poco los gobiernos van adquiriendo con una facilidad increíble el control de la sociedad, quitándoles el principio de libertad asombrosamente. De esta forma no debería sorprendernos como el mundo entero podría llegar muy pronto a estar bajo un orden totalitario.
Para entender lo que estoy expresando permítanme poner otro ejemplo: Sí en este momento alguien emite un criterio opuesto al único organismo que está calificado para hablar sobre la pandemia, ¿Estas voces serian expuestas para el debate?, o ¿Serian silenciadas para no tener oponentes?