Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza; y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, y en todo animal que se arrastra sobre la tierra.
Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó. (Gn. 1:26,27)
Como vemos en el texto, el ser humano fue creado como la cúspide de la creación. Fue creado un ser completo con dignidad y autoridad, para administrar la vasta creación.
Pero, si somos el resultado de un grupo de aminoácidos que evolucionaron y formaron igualmente una mosca, un ratón o un hombre, entonces nuestra vida no tendrá más valor que la de un insecto o de un roedor. Por el contrario si somos el resultado de la creación de Dios a su imagen, entonces nuestra vida tendrá un valor intrínseco propósito y destino.
Parafraseando el refrán que dice: “Dime con quién andas y te diré quien eres” podemos expresar: “Dime lo que crees y te diré lo que piensas de ti mismo”. Nuestro creer tiene implicaciones tremendas. No es de sorprendernos que en esta sociedad posmoderna caracterizada por la creencia en hipótesis naturalistas se haya incrementado aceleradamente el aborto, la eutanasia y los suicidios.
En los libros de texto desde la escuela hasta la universidad se muestra la evolución como un hecho científico probado. La literatura Darwinista hizo afirmaciones que presentaron al mundo como implicaciones lógicas de la ciencia, y esto sucedió a pesar que la metodología científica siempre proclamó que encuentra su lugar donde las teorías son sujetas a las pruebas rigurosas, y así mismo la metodologia está ausente cuando se pretende proteger la teorías al no someterlas a las pruebas. Es decir se presentó como un hecho probado el “hecho de la evolución”, aun sin demostrar las pruebas.
Las implicaciones de aceptar estos credos naturalistas están llevando a nuestra sociedad a una desesperada búsqueda de valor. Por ejemplo: La incesante búsqueda de títulos. ¿Estaría también dentro de esta ansiada búsqueda de valor?